bueno y que cuando me equivoco en el escenario pongo una cara parecida a la del minuto 4,08
Al hilo de una reflexión que hacían en http://jenesaispop.com/2010/03/08/nixon-y-espaldamaceta-ocho-y-medio/ , me dio por pensar. Qué hacía que la gente siguiera la costa brava cuando era un grupo que ofrecía las claves en bandeja para que, en ocasiones, no se aceptara nuestra propuesta. Pues bien, al ver este vídeo, y hablo por mí, la costa brava pienso que otorgaba la banalidad de un salón de actos de colegio. Con las cortinas sucias y unos músicos que habían sabido aprender a perder. En el fondo éramos escritores de canciones sobre la ficción de que la vida no va en serio, que lo más emocionante de la vida es una fiesta de fin de curso de primaria.
Pasaron los años y la vida nos trató como si todo fuera en serio, pero cuando veo este vídeo me niego a reconocerlo. Supongo que la gente que siguió aquella banda sintió algo parecido. Yo por mi parte no lo cambiaría por nada.
6 comments:
Sigues siendo así, dando saltitos con los talones y moviendo la cabeza en el escenario, con esa emoción contenida, así medio disfrazado de mayor y con la armónica.
Un abrazo
eva
Qué curioso.Pensé acerca de eso mismo cuando escribía vuestra biografía para la fonoteca. Mi conclusión es que La Costa Brava era como el Vicks Vaporub, familiar y balsámico. El cinismo y la ironía acaban por cansar y en el fondo todo el mundo desearía volver a ser inocente. Lo vuestro parecía inocencia autoimpuesta, así lo dije, o lo que es lo mismo, negar los prejuicios levantados como un muro por la experiencia, que a veces nos hacen perdernos las cosas básicas, que suelen ser también de las más chulas.
Por eso se os seguía (y se os sigue). Yo tampoco cambio a La Costa Brava por nada.
Un saludín.
jeejej Eva esa es la imagen.
Marta, la verdad es que a veces hay que hacer el ejercicio de analizar la inocencia, como dices la experiencia no debería quitarnos eso nunca
Para mi, La Costa Brava era una sensación constante de felicidad... pasara lo que pasara. Cada concierto al que fui, tuve la sensación de formar parte de algo realmente mágico. La química que había entre vosotros, el rollo que teníais con los "costabravistas", la gente maravillosa que conocí gracias a vosotros en el foro, en conciertos, en bares. Sí, para mi La Costa Brava, es felicidad todavía hoy, así que... también lo será mañana.
Lo que está en bandeja es el comment de que somos muchos los que no cambiamos a La Costa Brava por nada.
lullaby, la verdad es que nosotros siempre tuvimos esa sensación, desde el rincón más pequeño y bonito al festival más aséptico, nosotros nos dejamos llevar por eso también.
Isaac que te voy a contar a ti hijo mío, por cierto me dijo fran que estuvo muy bien el concierto de Cádiz, a ver si nos podemos ver pronto
un abrazo
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