
Viendo este docu sobre PTSD, y dado que es uno de mis temas clásicos me puse a pensar sobre las cosas que me han sucedido en los últimos años.
Cuando uno se dedica a este negocio de la vanidad solo la amistad le puede guiar. Esta sentencia corresponde a cosas muy personales pero en definitiva viene a decir "no exijas nunca lo que la gente que te quiere no querría para ti". O lo que es lo mismo, busca el reconocimiento, perfecto, pero no sacrifiques el amor... la mitad de los grupos se va a la mierda por no hacer caso a esta sentencia.
Siguiendo este argumento pensé en Angelo Crapsey, uno de los primeros casos registrados de suicidios después de estar en el campo de batalla. El mundo es la guerra, para bien o para mal. La vida de muchas personas es tan miserable que no merece la pena ser recordada, normalmente jamás se tomaron el riesgo como algo personal. Otros alcanzan la gloria y la belleza sureña y otros pocos viven cosas extraordinarias pero al regresar para contarlas, una mina en el océano perdida hunde su barco, su vida y todo lo extraordinario que le sucedió, o simplemente no saben cómo contarlo y terminan con su vida.
Uno de los miedos mas recurrentes de mi vida es no poder contar lo que me pasa. El mundo está lleno de minas en el océano y sortearlas es casi más difícil que encontrar la gloria. Yo no sé si lo que cuento es extraordinario, si voy a alcanzar la gloria o si la vida es miserable; yo estoy tremendamente agradecido por los remansos de mi vida, por poder contarla pero a veces pienso que esto está lleno de minas, de complicaciones sin intención alguna, bombas olvidadas en el camino. Quiero decir que no hay conspiraciones y gente en contra tuya, solo minas que estaban destinadas a otros que lo mismo te las encuentras tú de vuelta a casa.
Por todo esto cada vez selecciono más lo que escribo, retengo información, porque no quiero que un fortuito desastre entierre lo que tengo. Al final solo cuenta la memoria, lo importante es ser recordado en el sentido trágico, y para ello te tienen que querer, de nada sirve dejarse llevar por la vanidad. Si la gente que está contigo no te quiere, el grupo se va a la mierda.
Todo esto es para decir que estoy muy feliz de que este nuevo proyecto con Ramón y Fran esté asentado en la amistad y las canciones; así creo que será recordado.
PD. además a los tres nos gusta mucho volver a casa después de tocar.