Tuesday, November 02, 2010

adicto feliz 3


“Los sonidos de la selva”

No me di cuenta de que huía de George hasta que me vi siguiendo un rastro por la selva.

El agua que brotaba desde mi boca me guió. Caminaba alrededor de las ruinas circulares jesuíticas. Yo dejaba un reguero a mi paso. En realidad buscaba la respuesta a la cuarta pregunta que formulé a George.

Los sonidos de la selva reverberaban contra las ruinas, contra mi boca abierta. De ella salía agua, era un gran salto de agua. Un sendero paraguayo parecía abrirse a mis pasos.

Ya sabía los nombres de los animales de George, sabía perder en el juego del Coyote y la oveja.

Entonces me di la vuelta y empecé a confundir mi agua, mi salto de agua, con un extraño líquido que se unía por detrás a mi pequeño riachuelo.

Era la solución, era tal vez, el camino que yo mismo estaba marcando, que volvía hacia mí. Mi salto de agua, mi infección volviendo a mí.

Ahora mis ojos ya no vigilaban las piernas de plástico de George. Estaba siguiendo mi propio camino, el que volvía a mí desde mi boca.

A mi lado estaba la imagen del jorobado de Notre Dame. No entendía qué hacía ahí, pero ahí estaba.

Cuando todo terminó vi el principio del camino de agua que me había llevado todo el tiempo.

Allí estaba “Graciela González con cariño”. Sobre una de las ruinas circulares, desnuda y orinándose en las piernecitas.

Estaba sentada en el borde de una bañera de metal con adhesivos en forma de pez en el fondo, así nunca podría resbalar. Con los brazos estirados sonreía y se sentía orgullosa de que yo la viese orinar en la bañera.

Sabía de dónde venía mi salto de agua, mi catarata, mis infecciones, mis obsesiones. “Graciela González con cariño” y su pequeño salto de agua se había encontrado con el mío allí, en las imponentes ruinas jesuíticas .

Los sonidos de la selva ya no se oían. Después de encontrar a G.G. , aún no sabía qué significa Guaraní pero ya no me daban miedo los sonidos de la selva. Ya podía caminar sin temor por sus sendas porque “Graciela González con cariño” me amaba y yo amaba su sucio salto de agua.

No comments: